Caerán mis palabras derrotadas ante las persianas amarillas en el cielo.
Caerán.
Piezas de un mundo sin lágrimas, con un valor agregado multiplicado mil veces por el precio del dólar negro.
Naranja.
Color naranja.
Viviremos en un mundo dominado por sueños y vivencias, viviremos aprendiendo dÃa a dÃa, hora a hora. Sonaremos/soñaremos, seguiremos.
Hoy te digo.
Seguiremos.
Y se que observaras el nuevo desinfectante verde con olor a manzanas que esta esperando por ti en el anaquel numero cinco del supermercado.
Yo esperare en el andamio gris a que venga la señora que me vende el almuerzo.
Hace un buen pasticho;
Un muy buen pasticho.
Pensare en la mejor manera de hablar y pedirle a él que te cuide y no te deje fallar.
Solo lo pensare.
No se porque lo hago.
No lo se.
Hablar en futuro.
Se agotaran las expectativas de imágenes perfectas que jamás pude tomar.
Pero se que las tendré aquÃ.
Panorámicas, casi.
Sinceras.
Cuantos deseos hay en ti…
Somos simples, como la sal y dulces como el mar;
Somos dos.
Somos uno.
Asà dicen.
Y gritan a una voz bajo el agua, perfectamente acomodados al espacio de doce centÃmetros, con la plica en su octava y la mirada en las almohadas.
Almojadas, perdón.
Perdonare.
Se que lo hare.
I
Matriculando cada pestaña
Que decida vivir en el suelo.
Sonriéndole a la vida
Y aprendiendo a amar al polvo.
II
Sacando los colmillos para asà demostrar
Que dominan y saben amar.
No lo saben.
Pero asà lo creen.
En el cielo esta escrito.
En el cielo esta.
Llegar hasta ti.
Nada me cuesta clausurar la terquedad de mil palabras subrayadas
y en negrita.
Me gusta el carato chama.
Es mango, es fruta, es…
No sueño con un mundo distinto al tuyo.
Vivo en un mundo asÃ.
De ranas.
Y de algo mas…